El Duomo: la catedral que da el horóscopo del día

El Duomo de Milán es lo primero que ver y que hacer en Milán.
Construida completamente en mármol, con capacidad para 40.000 personas, el Duomo de Milán es el primero en la lista de que ver y que hacer en Milán.

Si vienes justo al mediodía, podrás ver cómo un rayo de sol que entra por un pequeño orificio en la cúpula de la nave central del Duomo de Milán cae justo sobre el signo zodiacal de ese día.

El cálculo astronómico se hizo hace más de 700 años, cuando se estaba construyendo la Catedral de Milán. Y, lejos de los preceptos católicos más ortodoxos, se instaló en su piso unas palmetas de mármol blanco y negro con los 12 signos del zodiaco, dispuestos matemáticamente en torno a un meridiano de cobre.

La ubicación estratégica de los signos zodiacales en el piso de la catedral de Milán es el secreto astronómico que hace del Duomo uno de los imperdibles de qué ver y que hacer en Milán.

Por otro lado, podrás admirar la iluminación interior, que se agradece a sus amplias ventanas y vitrales que permiten que la luz penetre de una forma particular, coloreando las paredes de tonalidades diversas y dándole a este frío edificio de piedras un aspecto cálido.

Un imperdible de Milán

No sólo por eso el Duomo es un imperdible que ver y que hacer en Milán. También porque es la catedral más grande de Italia y la quinta más grande del mundo. Tiene 157 metros de largo, una superficie de 11.000 mt2 y capacidad para 40.000 personas. De 108 mts de altura, su principal atractivo es su terraza. Pero también tiene mucho para sorprendernos al visitar su subsuelo.

Qué ver y qué hacer en Milán recomienda subir a la terraza del Duomo.
Arriba: la azotea del Duomo del Milán es uno de los principales atractivos turísticos de esta ciudad lombarda.

De estilo gótico, con algo de renacentista, el Duomo de Milán fue construido completamente en mármol, proveniente de las canteras de Candoglia, en el Lago Maggiori. Las piedras eran ingresadas a la ciudad a través del canal artificial Naviglio Grande, diseñado por Leonardo Da Vinci, otro de los imperdibles de que ver y hacer en Milán.

Entre lo que hay que ver al visitar el Duomo de Milán están sus 135 agujas.
Arriba: entre lo que hay que ver al visitar el Duomo de Milán están sus 135 agujas, cada una sosteniendo a un santo.

Seis siglos se tardaron en terminar de construir la Catedral de Milán. Las primeras piedras se pusieron en 1368 y las últimas terminaciones se realizaron en 1965. Pero en medio, Napoleón Bonaparte contribuyó a acelerar el término de su fachada en mármol blanco, pero no alcanzó a estar terminada para su coronación en 1805.

Al centro, la catedral

La fachada construida en marcol blanco es algo que ver al visitar el Duomo de Milán.
Al centro: la fachada de 93 metros de anchos es parte de lo que hay que ver al visitar el Duomo del Milán.

Es importante saber que la «Venerable Fábrica del Duomo», institución creada en 1368, se encargó no sólo de construir la Catedral de Milán, sino también es la responsable de su mantención hasta el día de hoy.

La misma «Venerable fábrica del Duomo» decidió a inicios de la década del 50 fundar el Museo del Duomo de Milán, donde poner a resguardo los tesoros de la catedral que resultó severamente dañada en los bombardeos aliados de la II Guerra Mundial.

Visistar las 5 naves de la catedral de Milán permite admirar los vitrales.
Al centro: la iluminación interior de la catedral se debe a los vitrales que adornan sus cinco naves, representando escenas de la vida de la virgen.

Además de sus atractivos en las alturas, la visita al Duomo de Milán, permite admirar las cinco naves en que se distribuyen sus más de 11.000 mt2 de superficie. Entre ellas, la Nave central, la más alta, alcanza a los 45 metros de altura.

Abajo, los vestigios romanos

Además, Milán fue alguna vez la capital del imperio Romano de occidente. Sus huellas lo recuerdan en el subsuelo de la Catedral del Milán. Algo que podrás visitar y disfrutar en tu recorrido.

Visitar la zona arqueológica en el subsuelo de la catedral es otra cosa que hacer en Milán.
Abajo: los vestigios del imperio romano aún cuentan la historia desde el subsuelo de la Catedral de Milán.

Por último, entre lo que podrás ver en el subsuelo, están los restos arquelógicos que dan cuenta de los tiempos del imperio romano. Entre ellos, un batisterio cristiano del siglo IV, donde se dice que que San Ambrosio bautizó a San Agustín.

Mucho más que ver y qué hacer

El Duomo de Milán hay que visitarlo con tiempo: tiene 3.400 estatuas que ver, descubrir y disfrutar.

Pero recuerda o sólo el interior de la Catedral tiene puntos de interés que ver en Milán. Otro dato curioso a tener en cuenta son las 3.400 estatuas que ver en el Duomo de Milán. Una de ellas tiene un notable parecido a la Estatua de la Libertad de EE.UU.. Otras 135 que sorprenden corresponden a santos instalados en igual número de agujas que caracterizan a esta catedral. Del total, también 96 son gárgolas a través de las cuales se evacúan las aguas lluvia.

Tips de qué hacer y qué ver en el Duomo de Milán

  • El precio del boleto completo es de 17 euros y permite visitar el Duomo en sus tres niveles: terraza, catedral, la cripta de St. Charles y la zona arqueológica en el subsuelo. Como plus, también da acceso al Museo del Duomo, las exposiciones temporales y la Iglesia de San Gottardo.
  • En cambio, el precio de la entrada para visitar sólo la catedral cuesta 3 Euros.
  • El ticket se puede comprar en el sitio oficial online reservando fecha y hora. También lo puedes adquirir el mismo día en la Office Ticket, muy fácil de encontrar.
  • Recuerda, el horario de visita para la Catedral es todos los días de 8 a 19 horas. Último ingreso al las 18 horas.
  • El horario de visita de la terraza y la zona arquelógica se inicia un poco más tarde: de 9 a 19 horas.
  • Por último, la Iglesia de San Gottardo y el Museo del Duomo se pueden visitar todos los días de 10 a 18 horas. Último ingreso a las 17 horas.


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